miércoles, 9 de marzo de 2011
Aunque no te vuelva a ver
No sé qué está pasando a mi alrededor, ya nada es igual, no se escucha la risa de la gente, la brisa corre en otro sentido, cuando llega la noche las estrellas no brillan como antes, la luna no se ve tan resplandeciente, todo en mi mente me da vueltas, y al poner mi mano en el pecho siento que mi corazón late más lentamente, las rosas se marchitaron, siento que algo malo me está sucediendo y realmente me está matando poco a poco.
Lo que más quisiera en estos momentos es saber qué piensas, y si eres feliz, y si no fuese así le suplicaré a Dios que te haga la mujer más feliz del mundo, que cruce pronto en tu camino el hombre que sea capaz de llenar tus silencios, quien te quiera toda la vida, que te escriba las más románticas cartas de amor y componga las mas sentimentales canciones, quien vea el amanecer junto a ti, que encuentres en él, el hombre que nunca pude ser para ti.
Estas palabras que hoy te escribo son para hacerte saber que eras para mí. Quiero que sepas que nada en el mundo me era más importante que tú, tenía el corazón enamorado, eras la única en mi vida, te amé como nunca he amado a otra, mis ojos, mi corazón y mente eran solo para ti, eras mi musa, mi vida, mi todo y lo sabes bien, nunca quise alejarme de ti, me gustaba escucharte, sentir tu voz, mirarte a los ojos, poner mi mano junto a la tuya, tocar tu pelo, reír junto a ti, mirar las estrellas contigo a mi lado aunque supiera que ni todas ellas juntas iban a superar tu belleza, moría por ti, ya nada era mío, las cartas que escribía tenían un solo destino, tú, quise ser el más romántico del mundo, buscaba las flores mas lindas, quise ser el hombre perfecto para ti, te metiste muy profundo en mi corazón y no quiero sacarte a menos que me lo pidas, y pídeme lo que sea, pero te pido que nunca se te ocurra pedirme que te olvide porque nunca lo voy a hacer, quería que fueras feliz conmigo.
Pero como ya tomaste tu decisión y quiero que sepas que aunque la distancia nos separe, pase el tiempo y nos pongamos viejos y llenos de arrugas, voy a seguir sintiendo lo mismo que he sentido por ti, que seas muy feliz, te amo y amaré, aunque no te vuelva ver, te amo.
jueves, 3 de marzo de 2011
La Caida de un Poeta
En la guerra como en el amor se dice que hay unas en las que ganas y otras en las que pierdes, pero que pasa después de la derrota, que hay mas allá de un corazón roto, que pasa cuando no terminas de escribir aquel poema, el que se supone tu máxima creación.
Es difícil realizar un pacto al finalizar y que todo quede como antes de la derrota; la cólera se posa sobre el amor y la razón, orgullo y vanidad son buenas compañeras; tiene que pasar mucho tiempo para que se logre algo comprensión y que ambos logren su bienestar.
Es difícil el amor verdad.
Aquel día en que pusiste aquel anillo de compromiso en su dedo pequeñito pensaste que seria para siempre. De ahí al altar el camino es largo y los problemas se acrecientan como sospechando lo que va a suceder. Y entonces llega el día en el que te dijeron, esto no está bien, tengo otros planes para mí y tarde o temprano me iré a China a trabajar por allá y nos tendremos que separar.
Y los planes de vivir juntos por siempre, las mañanas al despertar juntos, las noches de cena preparada por él que llegue primero a casa, los besos y caricias que siempre se imaginaron; a donde se va esto o donde queda todo esto.
Lo único cierto es que aun no hay respuesta lógica para esa pregunta. Lo que queda es ponerse nuevamente de pie, así como cuando un poema incompleto es guardado como bosquejo y luego considerado una inspiración para una nueva creación.
Cuando el amor termina, un buen caballero, el poeta que siempre encuentra inspiración en el amor, nunca deja de escribir, nunca deja de enamorarse.
Yo aun guardo varios poemas inconclusos y ahora estoy escribiendo uno nuevo, en el cual el primer beso fui único y salado, uno que espero lleve estampada nuestra firma. El amor te da fuerzas para seguir intentando e intentando; he caído miles pero aun sigo en pie. Y tú piensas seguir ahí en el piso o empezar a escribir tu nuevo poema.